El presidente del Girondins de Burdeos, Jean-Louis Triaud, quiere a Marouane Chamakh como si fuese un hijo. Y ese cariño que se ve en la foto se traslada a hechos concretos, porque el directivo ha cerrado -una vez más públicamente- las puertas de salida para el astro marroquí del campeón de Francia.
"No venderemos a Chamakh. No hay ninguna información al respecto y para mí es un asunto terminado. El jugador se queda con nosotros", aseveró Triaud a L'Equipe.
El presidente del Burdeos insistió en que Marouane "es un jugador decisivo" para su equipo, y aclaró que la directiva no tiene intención de resentir una plantilla que apuesta no sólo a ganar un nuevo título de Liga en Francia, sino a llegar lejos en la Champions. Ya están, de momento, en octavos de final.
De esta manera, podrían irse de nuevo al garete los planes del Arsenal de fichar a Chamakh. Ya hubo una oferta concreta el pasado verano, que resultó insuficiente, y ahora se habla de una nueva intentona tras confirmarse la grave lesión de Robin Van Persie, que estará al menos cuatro meses de baja.
Parece que Arsene Wenger tendrá que buscar por otro lado al reemplazante del astro holandés, y también se quedarían con las ganas de Chamakh otros clubes, como la Juventus, el Manchester United y el Everton, que tocaron al agente del marroquí